Entrevista a un Supervisor/Mentor Educativo

Entrevistado: Claudia Mata

La reunión se lleva a cabo en el salón de clases de Claudia, el lugar al que regularmente acuden los maestros docentes nuevos a observar su clase como parte del entrenamiento y apoyo brindado por ella. La entrevista inicia con la pregunta: Cuánto tiempo tienes desempeñando el puesto de Supervisor?
Ella menciona que lleva tres años ayudando a los nuevos docentes en el área bilingüe de primer grado de la escuela donde labora, y agrega que es un requisito interno el que un Mentor o Supervisor tenga por lo menos tres años de experiencia en el puesto que va a supervisar, por lo que se concluye que lleva laborando en el centro educativo seis años consecutivos.
Cuando se le cuestiona el motivo por el que se desempeña como Mentora, ella argumenta que es algo que le gusta mucho hacer, y refiere que ella cuando inició en la escuela, sólo había una maestra bilingüe y que ella misma fue su mentora, pero, sin afán de criticar, agrega que su función como mentora tenía mucho huecos, y que ella tuvo muchas dificultades para desempeñarse como docente ya que no contaba con la orientación, comunicación ni apoyo de su mentora. (Aquí Claudia ya no espera que le haga preguntas, sola comienza a platicar sobre sus experiencias y expectativas.) Claudia dice que ella sabe en carne propia lo que significa llegar a un país donde la lengua natal no es la suya, donde es difícil conseguir a alguien que hable el mismo idioma y te de orientación profesional, y que básicamente, ésa fue la razón por la que se decidió a ser mentora en cuanto tuvo la oportunidad. (Observación del entrevistador: ella es una persona muy servicial, muy responsable y organizada, le gusta brindar apoyo y contestar todas las dudas de sus supervisados, no escatima en brindar tiempo adicional al estipulado en los reglamentos ni a cargar con algunas responsabilidades adicionales a las suyas mientras el supervisado encuentra su propio ritmo y organización).
Al cuestionarle sobre la remuneración económica recibida por su servicio adicional, ella comenta que no es ése el motivo de su servicio, ya que semanalmente, sólo representa el 1% de su ingreso regular, y agrega que es algo que ella encontró como una acción de servicio al sistema educativo y a la sociedad, especialmente a los niños, ya que si un docente está bien asesorado y motivado, lo proyectará directamente en sus estudiantes, logrando que éstos logren un mejor desempeño académico y personal.
En cuanto a los lineamientos y procedimientos establecidos por la Administración para su puesto, ella refiere que existen líneas bien definidas que deben de seguirse y que le brindan la seguridad y conocimiento de estar realizando bien su trabajo, ya que tiene reglamentos, formatos, procedimientos y entrenamientos que la apoyan en el desempeño de su función.
Entre las dificultades que dice encontrar como Mentora o Supervisora, menciona el hecho de que no le parece correcto que en cuanto un docente se encuentra bien preparado y con suficientes conocimientos, busca un área geográfica donde sea mejor remunerado, dando lugar a que en la escuela donde Claudia trabaja, sea requerido contratar un nuevo docente que supla al anterior, haciendo que su labor de mentora no termine y no la deje avanzar hacia proyectos organizacionales más grandes, ya que tiene muchos proyectos y mejoras preparadas para ejecutar, pero al no contar con personal suficientemente experimentado, no tiene las herramientas para ponerlos en práctica y obtener los resultados que ella cree alcanzar y mejorar. En cuanto a apoyo por parte de la Administración, dice que no tiene ningún inconveniente pues cuenta con toda la confianza de sus superiores.
Se concluye con esta entrevista que a Claudia le apasiona su posición como prestadora de servicio, ya que indirectamente brinda apoyo a los niños a través de la contribución que pueda hacer con los nuevos maestros de los mismos niños.